
En el panorama que enfrenta la humanidad en este momento, ¿qué mejor manera de celebrar el Día Mundial de la Salud que resaltar la importancia de cada persona en la prevención de enfermedades y situaciones de enfermedad, y la promoción de la salud?
En el campo de batalla en el que se ha convertido el mundo en la lucha contra el COVID-19, escuchamos mucho sobre la importancia de mantener una higiene más que actualizada: lavarse las manos, usar alcohol en gel y, en algunos casos, incluso lavarse las manos. Se requiere el uso de guantes y mascarillas desechables. Sin embargo, ¿alguna vez te has parado a pensar que estas acciones son sólo una pequeña parte del papel que debes desempeñar para mantener tu salud? Si pensamos en las noticias que circulan a diario en los últimos días, nos bombardean con frases como: “Las personas mayores son el grupo de mayor riesgo”, “La mayor tasa de mortalidad por COVID-19 se da entre los mayores de 60 años” y tantas otras consignas alarmantes, pero este tipo de afirmaciones no nos salvan del estrés, de la ansiedad o del miedo y la inseguridad ante la situación actual aunque, quizás, no encajemos en ningún grupo de riesgo. Por ello, es fundamental que, como individuos que formamos parte de una misma sociedad, nos comprometamos con nuestro deber social de hacer lo que podamos para "mantener la salud".
Sin embargo, combatir enfermedades como la COVID-19 es sólo uno de los aspectos relacionados con la lucha por la salud. Profundicemos en la definición de salud según la OMS (Organización Mundial de la Salud): la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social y no simplemente la ausencia de enfermedad. Es el equilibrio dinámico entre el organismo y su entorno.
Entonces hoy ¿te sientes saludable?
Recordemos que hoy celebramos no sólo la ausencia de enfermedad sino también el estado de bienestar que abarca la salud mental y física. Una buena nutrición, ejercicio diario y un sueño nocturno regular son esenciales para que el cuerpo funcione correctamente, pero la salud va más allá. Necesitamos tiempo de calidad en el que podamos disfrutar de la compañía de familiares y amigos, practicar aficiones, invertir en alcanzar nuestros sueños y en aquello que nos hace sentir bien con nosotros mismos: ya sea lucir un nuevo look o comprar un nuevo libro.
Gabriela Yaluzan Patoja
Fisioterapeuta
Traducido por Kwan Ja
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